Lo que los pobladores cuentan…
Una de los mitos más conocidos en la sierra, específicamente en la parte central y de la que muchos hablan es del Muqui o anchancho. Este nombre deriva del vocablo quechua murik, que significa "el que asfixia" o muriska "el que es asfixiado". Aunque también Muki significa "húmedo" o "humedad". Debido a esto, se dice que el Muki aparece en los lugares donde hay agua.
El Muki es reconocido en la sierra, desde el sur en Puno, hasta Pasco en el centro y hasta Cajamarca en el norte del Perú. Aunque el nombre puede variar por los diversos lugares.
El Muqui es un duende de baja estatura, no llega al metro, es fornido, tiene cabello rubio, su cabeza está unido al tronco, posee una barba larga, su voz es ronca, su rostro está cubierto de vellos. Su mirada es intensa y penetrante, hipnótica y agresiva. Además, tiene unas orejas que terminan en punta. Habita en las minas de la sierra peruana.
Los pobladores o entes caso, los mineros dicen que este duende obstaculiza el trabajo de ellos, esconden sus herramientas, hacen ruidos o desaparecen minerales, pero a veces suele facilitarles el trabajo. Esto depende de la empatía que tenga el duende, si no le agradas te hará la vida imposible.
Se dice que, si alguien logra atraparlo, el Muqui trabajará para esa persona y le dará una gran cantidad de oro. ¿Lo atraparías?
Esta creencia surgió hace muchos años, en las antiguas tradiciones andinas sobre seres y demonios que habitan el “Uku Pacha”, que es el mundo de abajo. Este mito nació en si para explicar lo que realmente sucede con los trabajadores en las minas, que son testigos de sucesos extraordinarios diariamente.
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